Durante el invierno, los rescates suelen ser especialmente difíciles. El clima frío complica la tarea de salvar a los animales.
Para complicar aún más las cosas, muchos de ellos temen el contacto humano y prefieren quedarse en las condiciones gélidas antes que aceptar ayuda.
En esta historia, hablaremos de un equipo de rescatistas que recibieron un aviso sobre un animal escondido en la nieve y se apresuraron a ayudar.
Mientras un par de hombres conducían por la carretera y se ocupaban de sus propios asuntos, notaron algo inusual en la carretera cercana.
Parecía que algo se movía en la nieve, pero no podían verlo claramente. Bajaron de su coche y se acercaron a la zona donde avistaron al animal.
Se sorprendieron mucho al descubrir que era un perro escondido en la nieve. El pobre cachorro intentaba hacer un pequeño nido para resguardarse del frío, pero no entendía que eso no le ayudaría.
Los conductores llamaron a Steinbach Area Animal Rescue para que vinieran a ayudar a este dulce perro, y ellos respondieron rápidamente a la llamada.
Una cosa que notaron fue que estaba muy enmarañada y eso podría haberla ayudado a sobrevivir en el frío glacial.
Ella no mostraba voluntad de moverse a pesar de que sus rescatadores la animaban gentilmente. Entonces, se les ocurrió la idea de colocarla sobre una lona y moverla a través de la nieve hasta el interior del vehículo.
Una vez que estuvo a salvo dentro del auto, encendieron la calefacción y se apresuraron a llevarla a una clínica para verificar su estado de salud.
Cuando estuvieron allí, los veterinarios le informaron a la rescatista, Michelle, que tenía fiebre y estaba bastante deshidratada, pero que sobreviviría.
Ella era un poco tímida, así que la sedaron para quitarle el exceso de pelaje. Parecía suspirar de alivio una vez que se fue. Ahora lucía adorable.
La primera persona que realmente le encantó conocer mientras estaba en el refugio fue Graham. También disfrutaba pasar tiempo con ella y decidió adoptarla.
Después de acoger a la perra, ahora llamada Winnie, no perdió tiempo en acostumbrarse a su nuevo hogar. Allí conoció a muchos perros nuevos y todos se llevaban perfectamente.
Graham la llevó a una tienda de mascotas y le seleccionaron una chaqueta nueva. Debido a que estaba luchando contra el frío, su nuevo dueño pensó que sería mejor conseguirle una cálida.
Las cosas lucían completamente diferentes ahora. Winnie disfrutaba estar en la nieve y jugar con todos los presentes. Ha cambiado mucho en tan poco tiempo.
Tener un padre tan maravilloso cambió su vida por completo, ya que ahora vive en un lugar cálido con muchos hermanos perros y un dueño amoroso que haría cualquier cosa por ella.